Los médicos que realizaron la diligencia descubrieron que Emma Perazzo (2) falleció debido a los golpes de las piedras y no por asfixia. "Si tuvo una sobrevida, fue muy cortita", concluyeron.
La autopsia al cadáver de Emma Perazzo (2) determinó que su muerte se produjo como consecuencia del aplastamiento que le provocó la caída de las piedras en medio del derrumbe del acantilado en las playas del norte de la ciudad.
Los médicos que realizaron la diligencia concluyeron que el fallecimiento se debió a los golpes y no a la asfixia, por lo cual casi no habría tenido sobrevida. Según pudo averiguar LA CAPITAL tras comunicarse con fuentes del caso, el cuerpo de la menor presentaba hermorragias internas y desgarros en distintos sectores.
“Si tuvo una sobrevida, fue muy cortita”, dijo un informante en diálogo con este medio. De esta forma, la supuesta tardanza de la ambulancia -señalada por los familiares de la víctima y desmentida por el Ministerio de Salud bonaerense- es irrelevante, debido a que la gravedad de las lesiones no hubiera sido atenuable como se especuló en un principio.
“Con este primer informe daría la impresión que por más que le hubieran hecho tareas de primeros auxilios no habría sobrevivido”, agregó la fuente consultada.
Emma Perazzo, de 2 años y 8 meses, murió el lunes cuando en la playa donde estaba con sus padres se derrumbó un acantilado. El hecho ocurrió en el norte de Mar del Plata. Más precisamente, en la zona conocida como “Las Delicias”, cercana a Camet.
Pese a que los guardavidas del lugar se quejaron tras la muerte de la menor por la falta de carteles de alerta y prevención en la zona, desde la Municipalidad lamentaron el hecho pero remarcaron que “se trató de un accidente”. Sin embargo, la Justicia ordenó la clausura del balneario público y dictó una medida cautelar para restringir el acercamiento de las personas al sitio donde ocurrió el hecho y a sus inmediaciones.